miércoles, mayo 07, 2008

viviendo o soñando



Me gustaría compartir un cachito de mi libro con todos vosotros, un proyecto por moldear, un presente para compartir y un pasado para no olvidar.


“¿Hasta cuándo piensas recrearte en las historias surrealistas que creas e interpretas…? ¿Hasta cuándo te intentarás identificar con el personaje de tu historia inventada, de tu cuento de amor?

- Hasta que mi propia historia me haga enamorarme de ella, hasta que cuando llore sea de emoción por vivir en una ilusión, por sentir una realidad, por vencer mis miedos hacia la imperfección, por saber que sí puedo…

Amar hasta el punto de que sólo quiera hacer feliz a esa persona, admirarla y respetarla. Invertir energía en mostrarle la felicidad, en que la envuelva aunque nunca sepa que soy yo quien se la esté proporcionando. Amar es dejar tu individualismo y convertirte en su individuo, no hay propios intereses, ni pactos, sólo existe ella y el mundo para ella… o todo lo que tú puedas llegar a alcanzar. Y consecuentemente si la persona a quien le das tu corazón te ama te alcanzará su mundo. Pero amar es no esperar nada a cambio, el sentimiento más puro. Lejos de ser racional o animal. A años luz de estar perturbado por los caprichos e imperfecciones de los seres humanos.

¿Podemos? ¿Alguien hubo que amara así? A lo mejor sólo es un atributo divino… pero pensar así no os hace llorar de tristeza y desilusión. ¿Y qué debo hacer? ¿Rendirme, debo seguir creyendo, ó como los místicos lo llaman, tener fe? Pero la pregunta que hoy me hago es: ¿hasta cuándo…? ¿Hasta cuándo esperar? Inundándome más y más en mis propias fantasías, y así enalteciendo mis expectativas. Cada vez me exijo más, y dibujo mi esfera más grande. Cada vez busco historias más idílicas… pero de tantos cuentos, novelas, canciones y poemas alguna tendrá que ser real… eso es lo que me repito en los momentos de mayor melancolía, cuando siento que mis lágrimas pesan tanto que me devora el mundo terrenal, me mancho la cara con barro húmedo, y en el reflejo de mis llantos veo que esa no soy yo. A lo mejor nunca lo sea…

Vivir la historia de otro puede convertirte en un espectro, en un cobarde. Puede hacer que dejes de sentir para intentar sentir lo que ves a tu alrededor… eres un reflejo irreal, una mentira. El espíritu con nombre pero sin esencia propia, el cinismo embistiendo a su propio autor.
Decidme, hablo como una ilusa ó como una ignorante…

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hebe eres increible, lo tuyo es escribir no hay duda se me ha puesto la piel de gallina y has sabido trasportarme fuera de mis limites. por favor sigue escribiendo el mundo no se puede perder a alguién con tanto talento

Brida dijo...

Yo creo que tienes suerte, suerte de no haber perdido la fe, suerte de saber que es lo que quieres y no rendirte. No todos tenemos tu fuerza, es duro, muy duro, esperar algo y saber que no puedas hacer nada por conseguirlo... solo esperar... y seguir creyendo.

Y si no existen cuentos de hadas es porque la gente ha dejado de creer en ellos.

Anónimo dijo...

FELICIDADES
ESPERO QUE ESE ENORME RÍO DE TALENTO NUNCA CAIGA EN BARBECHO Y ALCANCE EL INMENSO OCÉANO DE PROVECHO PARA TI Y CUANTOS SEGURO APROVECHARÁN TU BAGAJE DE INTELIGENCIA Y GENEROSIDAD

Anónimo dijo...

¡ÁNIMO! SIGUE ILUMINANDO EL ÉTER DEL UNIVERSO Y AYÚDANOS A VIAJAR POR LA ETERNIDAD CON EL CONSUELO DE LOS VOCABLOS QUE HABLAN DE MELANCOLÍA Y AMOR, EMOCIONES ÉSTAS QUE NOS ATRIBULAN Y QUE HINCAN SU FÉRRULA EN LO MÁS PROFUNDO DE NUESTRO SER, DESDE LA ARCADIA FELIZ HASTA LA MISERIA DE LAS OSCURAS NOCHES DE INVIERNO
"er tito"